Buenas a todos… hace unos días pregunté por historias de Instagram si les interesaba un post sobre rutinas y tips que yo he puesto en práctica para mi pelo y especialmente para el cuero cabelludo sensible o con alergias y hubo muchos interesados. Para empezar les cuento un poquito mi historia con este asunto…

Desde chiquita (antes de los 3 años), era bastante alérgica a varias cosas, como mi papá… el chocolate me llenaba de urticaria de pies a cabeza, tenía una especie de caspa alérgica en los ojos, brotes de urticaria de razones desconocidas, rinitis… completita! Aún lucho de vez en cuando con la rinitis (en mí caso se acentúa por ejemplo con la lavandina y otros productos de limpieza así que evito estar en lugares donde la usan), algunos broncoespasmos y suerte ya casi nunca tengo urticaria. Pero lo que sí seguí padeciendo bastante es la picazón e irritación del cuero cabelludo. He probado de todo a lo largo de los años, shampoo de bebé de Johnson, de Biferdil, Loreal, Capilatis, BKD, Olio (línea hipoalergénica neutra)… y de los naturales, la mayoría. De los convencionales, los únicos que soporté fueron los hipoalergénicos de Biferdil y de Capilatis (y que por suerte son cruelty free también). Más adelante en mi vida, además de buscar opciones cruelty free quise encontrar opciones amigables con nuestro cuerpo también, sin tóxicos, muchos de los cuales de hecho seguro estaban relacionados con mi alergia (lo confirmé con análisis que me hizo el alergista, tengo una lista de los ingredientes con los que reaccioné). Como habrán visto en mi blog y en Instagram, fui fan por mucho tiempo de Boti-K, usé la línea capilar entera, me dejaba hermoso el pelo, y también usé en el medio un shampoo de Madreselva… hasta que en enero de este año hice un gran brote no solo de sensibilidad sino de urticaria (alergia propiamente dicha) en el cuero cabelludo, tenía la mitad de la cabeza ardiendo terriblemente. La línea hipoalergénica de Boti-k me hizo lo mismo, es más, mientras me estaba lavando el pelo me hacían picar más y arder, el de Madreselva no ayudó, no estoy segura qué pasó ahí. Sospecho que tuvieron que ver dos conservantes que usan (lo único menos natural de su formulación), pero hasta que no vuelva al alergista no podré saber.

Acá está mi primer tip: si tienen algún ideal sobre cómo debe ser los productos que usen (cruelty free, fórmulas puras y naturales, o lo que consideren importante), hagan una excepción por un mes al menos y usen lo que les ayude realmente. Yo suelo ser muy estricta con esto pero tuve que priorizar mi salud, y usar hasta recuperarme los productos que sabía con seguridad que no me iban a hacer peor (mi caballito de batalla para estos casos es el shampoo dermoprotector hipoalergénico de Capilatis, no es natural en absoluto, sí es cruelty free, pero me funciona en urgencias).

Segundo tip (muy importante): laven su cabello la menor cantidad de veces posibles por semana… como mínimo, día por medio, o cada dos días. Esto reduce la exposición a ingredientes potencialmente irritantes, le da un descanso al cuero cabelludo y lo regula. Yo no aguanto mucho más que eso, pero con lavarme dos días a la semana (o sea, una vez día por medio y otra cada dos), noté una diferencia gigante no solo en la irritación, sino en la grasitud del cuero cabelludo. Aunque parezca loco, esto les va a servir mucho si tienen cabello graso para regular la producción de sebo (les va a costar al principio, no lo niego, pero vale mucho la pena, van a ver como se les normaliza).

Tercer tip: si la irritación o alergia es muy grande, les preocupa mucho, o les ocasiona molestias fuera de lo común, ¡no duden en consultar a su dermatólogo! Les puede ayudar rápido, tal vez recetar un antialérgico adecuado… y luego que pasó el episodio, les recomiendo consultar a un alergista y hacerse un patch test para identificar si hay alguna sustancia en especial a la que reaccionan (es como un screening donde se pega a la piel un parche con muchos “botoncitos” con posibles alérgenos, para explicarlo simple, se lo deja dos días y después, al volver a la consulta, el médico ve cuáles reaccionaron).

Mi rutina:

Primero les cuento los shampoos hipoalergénicos que mejor me han funcionado hasta el momento: el dermoprotector de Capilatis (color azul) y el de Biferdil (envase blanco). Como acondicionador hipoalergénico, uso también el dermoprotector de Capilatis (celeste). No me gustan los ingredientes, lo admito, pero me salvaron, son muy efectivos en lo que prometen y en ese sentido, los recomiendo mucho.

En este brote de alergia de enero, combiné:

  • Un shampoo sólido (de Mimos de Spa) + acondicionador sólido sólo en largos y puntas(de Mimos de Spa) o enjuague de vinagre de manzana (abajo explico cómo hacerlo). UNA VEZ A LA SEMANA (las primeras tres semanas aprox).
  • Shampoo y acondicionador dermoprotector Capilatis. UNA VEZ A LA SEMANA. Terminé usándolo cada vez que me lavaba el cabello porque el sólido no me convenció (me dejaba engrasado el pelo, debe ser por algún desbalance en su formulación).
  • Si quería mojarme el pelo por el calor los días que no lo lavaba, hacía solo enjuague de vinagre de manzana.
  • Si el cabello estaba opaco/seco/sin vida: aceite de coco puro usado como mascarilla. Lo amo, es parte de mi rutina de todo el año. Simplemente usas una buena cucharada (o dos) de aceite (si está sólido frotalo con las manos de a poco, y se hace líquido), y lo repartís en largos y puntas, haciendo hincapié en las zonas más secas si es necesario. Se puede hacer como tratamiento pre-lavado (una hora antes del shampoo) o como tratamiento nocturno. Marcas que uso: God Bless You (neutro) y Tropical Life.

La primera vez que me hice el enjuague de manzana me ardió porque estaba muy irritada, así que lo recomiendo para cuando se haya calmado más el cuero cabelludo. Se prepara así: ¾ vaso con agua, ¼ del vaso con vinagre de manzana (usen el mejor que puedan conseguir). Da brillo, ayuda a desenredar y, lo más importante, regula el pH del cabello (que naturalmente debería ser ligeramente ácido, entre 4,5 y 5,5). El tema del pH es fundamental para la salud y la integridad del cuero cabelludo, de la piel y de la zona íntima femenina; un desbalance puede provocar todo tipo de problemas, como en el caso de cuero cabelludo, la excesiva producción de sebo.

Esta rutina la hice por dos meses, ahí ya logré normalizar mi pelo. Al volver a las opciones naturales, estoy usando los shampoos de Weleda (el de romero para cabellos normales, y el de melisa para cabellos secos), que si bien tienen sulfatos, el resto de su composición es buena y ni en mí (ni en mi papá, que tiene el mismo problema que yo) jamás generaron reacciones (ya los había usado muchos meses antes de todo). Como acondicionador, uso el de romero, también de Weleda.

Reflexión final: ¿consideraron la autogestión de sus cosméticos?

En el verano y cada vez más, estuve indagando bastante sobre cómo hacer cosméticos naturales yo misma, ya que se me hace tan difícil encontrar productos que sean inocuos para mí, y cumplan mis principios (cruelty free, veganos, amigables con el ambiente y con formulaciones naturales). Creo que la autogestión es clave para estos casos, y para todos aquellos que quieran saber qué ponen en su cuerpo, o que tengan un ser querido con alergias o hipersensibilidades que necesite algo especial, sin dejar de jugar y explorar su creatividad en el proceso de aprendizaje. Además, personalmente me parece maravilloso y muy entretenido, a la vez que útil, aprender las propiedades de las plantas para nuestra salud y nuestra piel, aprender a cuidarnos, no caer en los engaños marketineros de las marcas a las que solo les interesa lucrar, en fin… mimarnos de una forma diferente a la que estamos acostumbrados, con conciencia, focalizándonos en nuestro bienestar y en la armonía con lo que nos rodea (la naturaleza, de la cual además somos parte). ¡Los invito a considerar esta opción! Hay muchos cursos presenciales y online disponibles, de variados temarios y precios. Hoy les recomiendo dos en especial: los de Alma Natural Argentina, que son los workshops que da Anabella (que antes tenía la queridísima marca Alma Cosmética Natural), una mujer llena de luz, con mucha vocación para enseñar a través de sus posts en redes sociales y especialmente de sus cursos… ella tiene muchos conocimientos sobre plantas medicinales/fitoterapia, ayurveda, aromaterapia, formulaciones puras, ecología y sustentabilidad… todo lo necesario para aprender a hacer los productos que quieran o necesiten. Incluso anunció que próximamente viene un workshop de maquillaje natural (único y super especial ya que en nuestro país, encontrar maquillaje natural es misión imposible)!!! ¿Quién se anota? Los cursos de Anabella pueden ser presenciales u online, y la encuentran en Facebook e Instagram como Alma Natural Argentina. En segundo lugar, les recomiendo el curso de Kalimiel (está con ese nombre en redes sociales también), dictado por Nuria, naturópata, que viene en modalidad online y tiene un temario bastante amplio, así como un precio accesible, y también usa formulaciones estrictamente naturales, con consciencia ecológica y ofrecen materias primas de calidad en su tienda (y lista de proveedores confiables para los que hacen el curso); también se puede hacer presencial, a un precio distinto. Yo hice el curso online de Kalimiel, me sirvió muchísimo, sobre todo porque no podía viajar ni tenía posibilidades de hacer una gran inversión (soy estudiante que hace su carrera lejos de su hogar con lo cual hay muchos gastos y prioridades que cambian, algunos me entenderán), y espero poder hacer el de Anabella cuando esté online, sobre todo el de maquillaje ya que es un tema único y que me fascina, que ofrece amplia creatividad, y tengo absoluta confianza en la profe! Como tercera opción, de la cual hablo un poco a ciegas porque no conozco a la profesora más que por redes sociales pero parece que está muy bien capacitada, pueden chusmear los cursos y los posts de Mi vida botánica (la encuentran con ese nombre en redes sociales); en el futuro también me gustaría realizar alguno de sus talleres. Aparte, hay muchísimos cursos locales que tal vez haya cerca de sus ciudades, de centros ayurvédicos (voy a asistir a uno próximamente en Tandil), artesanos, fitoterapeutas… es cuestión de buscar e investigar, ir introduciéndose de a poco en este mundo y aprendiendo, paso a paso, disfrutando el proceso. Hasta pueden empezar buscando en youtube, leyendo, investigando propiedades de las plantas, ¡lo que más les interese! Yo hago mucho eso también, así he empezado a hacer por ejemplo mis primeros extractos en aceite. Tal vez lo que comenzó como una lucha con tu salud, tus alergias, etc., puede dar lugar a una actividad creativa que te apasione o hasta generar un emprendimiento.

Espero que les sirva y guste este post… leo sus comentarios, inquietudes, opiniones o lo que deseen compartir, acá o en mi Instagram!

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